LA SEPARACION SENTIMENTAL

Dicen por ahí que donde hubo fuego cenizas quedan Sin embargo en ocasiones, cuando el amor ha muerto, es poco lo que puede hacerse por salvar una relación. ¿Cómo saber qué hacer? Es la pregunta que queda flotando tras la separación…

Para nadie es un secreto que al comienzo de una relación de pareja esta se desarrolla generalmente en torno de mucha ilusión, volviendo la rutina cotidiana en más llevadera, pues si hay con quien compartirlas, las cargas se reparten, las tristezas se comparten.

Sin embargo, suele pasar que el tiempo deteriora la relación, la emoción del principio se convierte en tedio. En este punto se intenta todo por rescatar lo perdido. Nunca será fácil entender que algo que fue maravilloso haya terminado en un cúmulo de peleas y ofensas, pero será más fácil de superar si se dejan de lado sentimientos de culpa y se piensa en seguir adelante.

Cuando una pareja o un matrimonio decide separarse, es porque, en el mejor de los casos, ambos llegaron a la conclusión que la relación se terminó y que no hay vuelta atrás. Aceptar esta situación no es fácil y por lo general toma tiempo; más aún cuando uno de los miembros de la pareja no esperaba la propuesta. Siempre es más fácil sobrellevar la situación para quien propone la separación porque de alguna manera está preparado para ello.

“La tristeza por la perdida y “la etapa de duelo”, es lo más natural en estas circunstancias, el tiempo en el que va a tardar una persona en recuperarse varia de una persona a otra.

Superar una ruptura se requiere de decisión, esfuerzo y tiempo, este último en estas circunstancias se convierte en el mejor aliado. Lo que en un primer momento parecía imposible de superar, como el "nunca podré olvidarlo/a" o "no podré vivir sin él/ella", con el paso de los días se llega superar y la persona se encuentra en condiciones para iniciar, si así lo deseara, una nueva relación.

Sin embargo, lo importante es tener bien claro que si optamos por iniciar una nueva relación, la persona que ahora tenemos al lado no es responsable de lo sucedido anteriormente, pues de lo contrario se corre un alto riesgo de que la relación no prospere. Si usted siente que no puede superar la perdida, busque ayuda profesional,

Cualquier duda, llame al servicio de orientación en sexualidad de APROPO: 0800—70626 de lunes a viernes de 8 de la mañana a 8 de la noche y sábados de 8.30 a 8 pm. Visite también nuestra página web: www.nosedesexo.com

LAS HERIDAS DE AMOR

Tras una separación, y pasado el tiempo, es posible superar las huellas de la ruptura y decidir darse una nueva oportunidad, lo que no deja de ser un desafío, pero puede valer la pena…

En la vida, en general, cuando nos hieren, herimos y sufrimos, existen dos alternativas: ignorar lo sucedido, negar lo que ocurrió; o aceptarlo, analizarlo y tomar la decisión de continuar con nuestra vida afectiva. Es cierto que resulta difícil conectarse con las causas que provocan el sufrimiento. Pero es la única manera de salir del dolor eficientemente, creciendo, aprendiendo sobre uno mismo.

“Cuando una pareja o un matrimonio deciden separarse, lo aconsejable es profundizar en los motivos que llevaron a esta situación. Si éstos no son analizados, se corre el riesgo de volver a cometer los mismos errores en una futura relación”, anotó Trixsi Vargas, Asesora en Sexualidad y Salud Reproductiva de APROPO.

Intentar sobreponerse a una ruptura supone un alto compromiso, una cuota de dolor. Se debe “desinfectar la herida”, observar su profundidad, determinar de qué manera se produjo y, lo más importante, la forma en que se puede prevenir que vuelva a suceder. “Superar el duelo”, pues se trata de una perdida, es un proceso que lleva tiempo, esfuerzo, decisión y paciencia, pero es la única manera eficaz de lograr la óptima “cicatrización de la herida”.

Se debe tener presente que “después de la tormenta viene siempre la calma”, así que te sugerimos tener en cuenta estas recomendaciones:
· Cultiva una Mentalidad Positiva, aunque la separación puede ser muy difícil finalmente

lograrás superarlo, así que ahuyenta de ti pensamientos como: “nunca podre olvidarlo”,

“no podre vivir sin él”, pues estos pensamientos no son realistas y no te ayudan a sentirte

mejor.

. Así mismo pensar en quien tuvo la culpa o lo que se hubiera hecho para evitarlo no

contribuye a superarlo. No pienses en el pasado sino en el presente.

· Busca apoyo en amigos y familiares más cercanos, compartir con alguien los sentimientos

de tristeza o depresión ayuda a aliviar el dolor.
· Buscar realizar actividad física y de entretenimiento como: practicar algún deporte, ir al

gimnasio, al cine, leer un buen libro, etc.; al realizar estas actividades regularmente

mejorarán tu estado de ánimo además que te ayuda a estar distraída y no pensar

constantemente en la separación.
· Disfruta de tu libertad, no busques desesperadamente un sustituto, pues el iniciar una

nueva relación sin antes no haber resuelto el duelo de la ruptura la condenaría al fracaso.

Ten presente que alcanzar la felicidad no depende del azar sino del tiempo que nos tomamos para conocer y elegir bien a la pareja a quien le brindaremos nuestros afectos. Así que si reinicias tu vida social date el tiempo para conocer nuevas personas sin la presión de iniciar una relación amorosa.

Cualquier duda, llame al servicio de orientación en sexualidad de APROPO: 0800—70626 de lunes a viernes de 8 de la mañana a 8 de la noche y sábados de 8.30 a 8 pm. Visite también nuestra página web: www.nosedesexo.com

SE ACABA EL DESEO SEXUAL CUANDO LLEGAN LOS HIJOS?

Muchas veces con la llegada de un bebé a casa de pronto se acaban ciertas ventajas que la pareja daba por sentadas, como la posibilidad de ahorrar dinero o de quedarse dormidos hasta tarde, etc. "Como son muchas las tensiones que afectan la vida de una pareja después de que nacen los hijos, es fácil que la vida sexual quede relegada a segundo plano”, asegura Trixsi Vargas, Asesora en Sexualidad y Salud Reproductiva de APROPO.

Diversas son las razones por las que el deseo se puede apagar después del nacimiento de un bebé, pero la causa mas inmediata es física. Púes la falta de sueño, el agotamiento y el estrés provocados por el número de tareas que hay que llevar a cabo repercuten en ambos padres. Con frecuencia, ninguno de los dos tiene energía para algo más que un beso en la mejilla antes de dormir. Durante lo que suele llamarse "cuarto trimestre "(los tres meses que siguen al nacimiento del bebé), la fluctuación en las concentraciones hormonales de la mujer produce el equivalente químico de una ducha de agua fría. Esta parálisis sexual puede durar incluso hasta seis meses después del parto.

Sin embargo, lidiar con los factores psicológicos puede ser más difícil por ejemplo, muchas mujeres temen que sus cuerpos ya no resultan atractivos para sus cónyuges. Aunque las estrías y las libritas de más no extingan el fuego del deseo en algunos maridos, el ver a su esposa en su nuevo papel maternal a menudo los desalienta. Las mujeres que amamantan quizá eviten subconscientemente la intimidad con sus cónyuges, ya que el dar frecuentemente el pecho a su hijo agota su deseo de contacto físico al final del día. Estas interrupciones en la vida amorosa pueden provocar que el esposo se sienta desplazado por el hijo en el aspecto de su mujer.

Por eso, para muchos hombres, la maternidad y el erotismo no se llevan bien. Ventilando el problema, el tiempo y la paciencia resuelven algunas de estas dificultades, pero no hay que olvidar que la comunicación es esencial. Sin embargo, las charlas sinceras pueden tomar un giro negativo, especialmente si uno de los cónyuges se siente frustrado porque la actividad sexual ha disminuido.

Lo cierto es que hay que dar mayor importancia a la calidad y no tanto a la cantidad. Y desde luego, compartir el amor y expresar la sexualidad no implica necesariamente llegar al coito. Las parejas deberían pensar menos en lograr un objetivo y más en obtener placer. Por otro lado, los expertos convienen en que salir juntos y solos es vital para que el matrimonio y la vida sexual prosperen " Por lo menos una vez al mes, vayan al teatro o al cine, o reanuden cualquier actividad que tenían en común antes de que llegaran los hijos. Traten de no hablar de los niños, del dinero o el mantenimiento de la casa, sino de aquellas cosas por las que se enamoraron ", propone Vargas.

Cuando los conyugues se esfuerzan un poco en reavivar su amor, encuentran que también están reavivando su deseo erótico. El enamoramiento alimenta al deseo y el deseo es sumamente importante para una buena vida sexual. Dar al cónyuge "un respirito" Aunque suene contradictorio, es otra forma de mejorar la vida sexual.

Para consultas llame al Servicio de Orientación en Sexualidad de APROPO: 0800—70626 de lunes a sábado de 8 de la mañana a 8 de la noche. Visite también nuestra página web: www.nosedesexo.com